Una poderosa llamada a reconstruir
la confianza en una sociedad fracturada.
La desconfianza es hoy una forma de respirar.
Un gesto aprendido, casi involuntario. Desconfiamos
de los gobiernos, de los otros, de los discursos, de las
promesas. Desconfiamos incluso de nuestras propias
decisiones. Y, sin embargo, seguimos viviendo juntos,
compartiendo el espacio público, pidiendo ayuda
en silencio, buscando sentido.
Este libro parte de una preocupación moral:
¿qué pasa cuando dejamos de creer en lo común?
Victoria Camps escucha ese murmullo de fondo que
recorre nuestras democracias cansadas y nuestras
vidas fragmentadas. Lo interroga sin estridencias.
Lo piensa con cuidado. Porque tras la desconfianza
habita siempre una pregunta: ¿cómo seguir?
La sociedad de la desconfianza es un ensayo
sobre el presente herido por el individualismo,
la precariedad y el desencanto. Pero también es una
propuesta: la de reconstruir un ethos compartido que
nos permita sostenernos, confiar, cooperar, convivir.
Un gesto filosófico y político para no ceder a la
indiferencia, y recordar que la libertad —si quiere
ser digna de su nombre— necesita de los otros.