Cuando el príncipe Xian era pequeño, una serpiente blanca mordió a su madre, lo que la condenó a una muerte lenta y dolorosa. Las únicas curas conocidas son las perlas espirituales, difíciles de encontrar, o un antídoto creado a partir de la propia serpiente blanca. Desesperado y decidido, Xian viaja hasta la ciudad de Changle, donde un oráculo ha predicho que encontrará y capturará al animal. Siete años atrás, Zhen, una serpiente blanca que vivía en el lago del Oeste, consumió una codiciada perla espiritual que le concedió poderes especiales, entre los que se incluye la capacidad de adoptar forma humana. En Changle, Xian conoce a un apuesto y enigmático mozo de cuadras llamado Zhen. Los dos jóvenes se sienten atraídos el uno por el otro de inmediato. Sin embargo, Zhen enseguida se da cuenta de que él es la serpiente blanca a la que Xian quiere dar caza.
